sábado, 26 de julio de 2014

ciudad impía

pasan los días y las noches entre silencios secos y ventanas rotas
no sé dónde están las respuestas
y la duda ha dejado algunas plumas
el frágil eco de su risa en mis escombros

estoy descalzo y no entiendo nada
mis manos duelen por tu ausencia.
por las noches digo tu nombre como si alguien fuera a responder
debo estar cada vez más loco

a veces me pregunto si volveré a verte
si volveremos a encontrarnos
alguna tarde
si quizá algún día compartamos otra vez el mar
y la misma playa mientras me ofreces un cigarro
y dices que hace un día estupendo

pero sigo aquí, lejos de todo lo que alguna vez fue nuestro
las calles que anduvimos, los cines, los bares
los callejones sin salida de tu falda
donde recibimos la mañana entre besos y caricias interminables
son ahora estas palabras huecas

qué queda de nosotros sino algunas fotografías,
promesas incumplidas, sueños hechos polvo
tu número telefónico que ya no marco
un silencio de frío y la distancia

quizá si no fuera tan cobarde
si entendiera que el sentido de la vida se encuentra
sólo entre tus piernas y tus ojos
porque tenías razón en tus opiniones sobre el mundo
y su fracaso,
en tu manera de callar cuando las aves cruzan el cielo
y algo de mí se incendiaba en la hoguera de la duda
enemiga de las fórmulas
si no fuera tan cobarde
quizá
si me atreviera a renunciar a todo
si el fin del mundo, entonces,

cómo sería recobrar el curso de esa patria donde fuimos
uno solo y para siempre

pero me quedo así, como un palo
como una astilla junto al mundo que gira
sin sentido
como los escombros de una ciudad perdida

sábado, 19 de julio de 2014

verano

la ceniza y tus besos
la misma tarde
nada se lleva el viento

viernes, 18 de julio de 2014

paisajes

la iguana se detiene
en los recuerdos
tú y yo la contemplamos

jueves, 17 de julio de 2014

quedan chelas en el refrigerador

es cierto, seguimos creyendo en dioses
que están de nuestro lado o
que nos ignoran
en dioses que quizá fueron creados por
otros dioses
mientras bebes cerveza
y miras por el balcón cómo cae el día
sin hacer nada ni pensar en nada
ni esperar nada
tan solo mirando las gaviotas, los mirlos,
las palomas,
esos pétalos que están a punto de caer
hacia el vacío
y quizá se sigue creyendo en dioses
que quizá no existan
o que quizá sí
pero son dioses a los que no les importa
eso que tú llamas el sentido de la vida
o quizá sí
y es otro
pero son incapaces de corregir el destino
de los hombres
o es posible que sea eso
que no haya que corregir nada
y sea ese el único destino que han trazado
para ti y para mí
o para el azar
donde tú tratas de construir una casa
tener un jardín
y ver crecer a tus hijos
mientras vas por otra chela al refrigerador
tranquilamente

miércoles, 16 de julio de 2014

sin salida de emergencia

y qué quieres que diga de todo esto
qué se supone que debo hacer
cómo tengo que actuar
levantarme de esta silla
salir de casa
y sumarme a la marcha
tomar un arma
¿rezar?
¿eso detendrá las balas,
los misiles, los aviones?
¿eso devolverá
la paz? pero ¿que diablos
significa esa palabra?
cómo quieres que te explique
que eso de la brutalidad
ahí tienes los libros de historia
los archivos fotográficos
las memorias
eso de la brutalidad
eso del odio
parece ser algo
que siempre ha estado ahí
me resulta ridículo
absurdo
infernal
qué se puede hacer ante esto
no lo sé,
neta, no lo sé
aunque te duela
nos duela
o te valga madres
la ceniza es evidente
las cosas no van a cambiar

domingo, 13 de julio de 2014

y seguimos

la soledad de noche
es preguntarnos
sin ninguna respuesta

jueves, 10 de julio de 2014

así habló Zarathustra

sobre el libro de Nietzsche
cae la noche
y se enciende una lámpara.

miércoles, 9 de julio de 2014

el mundo es una guerra entre ricos y pobres

mientras el piano inunda este cuarto
niños y niñas son asesinados
en las fronteras
niños y niñas con nombres y apellidos
como el tuyo
niños y niñas a los que les pasaron lista
a los que les jugaron 
o no 
una mala broma
en la escuela
asesinados
acribillados
niños y niñas asesinados 
por órdenes de un pendejo
que obedecen otros pendejos
que también fueron alguna vez 
niños y niñas 
recién nacidos que se cagaron
en los pañales
que necesitaron de su madre 
o de su padre o de alguien
para sobrevivir
porque la oscuridad los devoraba
asesinados, niños y niñas
tras la puerta de tu casa
tras las ventanas de tu oficina
a unos centímetros de tu corazón 
que de pronto late acelerado
porque recordaste un pastel
una cita o un vacío
en las fronteras y tierra adentro
mientras el viento pasa
asesinados
acribillados
descuartizados
mutilados
por sujetos que perdieron la inocencia
y se volvieron dementes
al cavar hoyos ya cavados por otros 
hoyos por otras sombras
sujetos que necesitaron el pecho
de su madre y la caricia 
y el abrazo
asesinados
mientras las notas para piano de Rameau
muerden la luz matutina 
que se fragmenta en este departamento
allá no cesan los gritos 
ni el llanto
ni las palabras de amor
ni los bombardeos 
y los viejos y los hombres y las madres
tratan de salvar a sus hijos
los cargan y atraviesan el polvo 
y los escombros
entre cadáveres
no importa que se pierdan los cuadernos
los libros, las vajillas, el café
sábanas, almohadas, ropa sucia,
las cosas cotidianas de la vida
no importa que atrás queden las paredes
los techos hechos polvo
destrozada la puerta que alguna vez 
cruzaron para tomar agua o pan
niños y niñas son asesinados
allá afuera
y aquí adentro también
mientras escribo este poema
que no sirve para nada

martes, 8 de julio de 2014

muerdo tu cuello

cuántos hombres no te han visto esta tarde
y han querido tocarte, levantarte
la falda y sentir tu tanga mojada
no importa si la lluvia resplandece
lenta y suave en la breve inmensidad
de tu deseo. cuántas veces en esta tarde
no has querido unas manos, no importa cuáles,
manos desconocidas o con alguna historia
trazada en los caminos de tu vida,
encima de tus pechos, al fondo de tus piernas.
te digo esto mientras empiezo a tocarte
y disfruto el olor de tu deseo.
el hecho de pensarte en otros brazos,
mientras pasa la lluvia, me la para,
cuántos no se masturban pensando en tu culo
en tenerlo inclinado como ahora lo tengo
en tus labios mojados y tus ojos cerrados
yo también lo he soñado.
tu desnuda presencia sobrecarga el relámpago.

domingo, 6 de julio de 2014

una canción francesa

la oscuridad de esta canción francesa
en la oscuridad de esta palabra
que navega en el océano de esta noche
perdida y sin necesidad de encontrar
nada ni a nadie ni nunca ni después
y esos soles escupidos por el acordeón
de esa canción francesa
en los fríos y solitarios puertos del norte
soles borrachos como ese yo borracho
bailan en la noche
al compás de esa canción francesa
que se termina
mientras yo cuento las monedas
para ver si me alcanza para otro trago

viernes, 4 de julio de 2014

el orden de las cosas

no he podido encontrar la calma desde hace tiempo.
los recuerdos acuden a mi vida
y trato de ordenarlos para que los entiendas
también tú, porque yo soy la mitad de todo eso.
ahora,
mientras busco en la luz del mediodía
el orden de las cosas,
la exacta matemática del camino andado
donde aprendí a olvidar
a no temerle a la palabra amor, justo ahora,
cuando el viento levanta una pregunta
y queda una respuesta junto al polvo
sospecho que tu vida también es un desorden
y que por eso mismo
lo intentas, cada día te levantas,
te atas los zapatos, caminas por la calle
y apuestas tus minutos al juego de las horas
en la fría oficina de este mundo
que nunca ha sido tuyo y que tampoco entiendes.

jueves, 3 de julio de 2014

el paso de las horas

soy un sueño irresponsable
el mañana de un ayer
aferrado a testimonios falsos
la historia del fracaso
y la alegría
las estaciones en el caribe
ese tomo en una biblioteca
que algún día
unas manos tomarán
para sacudir el polvo
y encontrar ecos de su vida

miércoles, 2 de julio de 2014

cotidianería

amargo desayuno
los titulares
de este país de mierda