jueves, 31 de diciembre de 2015

atronadoras explosiones

las luces en el cielo truenan, llueven.
aquí el fuego, la pólvora es juego,
risas, baile, festejo. truena el cielo.
fuegos artificiales esta noche,
noche vieja, año nuevo, pensamiento
de la vida que pasa entre ciudades,
campos, desiertos, playas, entre restos
de restos olvidados y memoria.
los fuegos pirotécnicos, aquí
son sólo eso, fuegos pirotécnicos.
pero también espantan a los niños
esas atronadoras explosiones,
aunque en esta ciudad no haya una guerra.
piensa en eso, un poco, sólo un poco.
no te quiero arruinar la fiesta, pero,
mira la noche, luces explotando.
creemos darnos cuenta de las cosas.

miércoles, 30 de diciembre de 2015

hallazgos en el polvo

entre viejas palabras aparece tu nombre:
acostada en la arena de la tarde
me dices que la música del cielo
tiene que ver con Bach y con nosotros.
bebemos mezcal tú y yo y tu marido,
y te quitas las bragas por debajo
de la mesa, me tocas para dármelas.
loca y sabia, rebelde y fraternal.
te gustaba jugar con el destino,
con los hombres celosos y su miedo,
con esa soledad que compartimos.
me gustabas un chingo.
estas palabras, aunque viejas, viven por ti,

martes, 29 de diciembre de 2015

cuando el amor no existe

si hubiéramos tenido tiempo aquella mañana.
tú querías largarte con tu amigo.
dijiste: “siempre le he traído ganas”.
te bastaba con una sola noche a su lado.
y lo intentaste.

sin saber qué decir, cómo callar el silencio
de la carne y el deseo, aquel verano.
nuestro secreto fueron besos dulces,
frenéticas caricias en tu cama
matrimonial.

ahora que te evoco, a mi lado una cerveza,
pienso en tus juegos lívidos y tiernos.
en tus pocas palabras que decían
lo único que al deseo le interesa.
ahora hace frío.

aquel amanecer en tu ciudad, sin dormir,
después de no sé cuántas putas rayas,
las botellas vacías, el sudor,
los besos agotados en tu cuerpo.
tú y tu cuerpo.

porque te habías largado con tu amigo la noche
anterior, lo intentaste, me dijiste,
con una luminosa y despiadada
sonrisa en tu sonrisa, y te besé.
hasta el cansancio.

tú y yo nunca seremos la noticia de nada.
sólo nuestro secreto es perfecto.
un mundo, otro mundo, nuestro mundo.
la inmediatez de aquel amanecer
inoportuno. duro y necesario.

a nadie ha sido dado detener
el tiempo ni el destino de los hombres.
a quién le importa.

quería estar junto a ti, la desnudez de tu cuerpo,
el canto de los pájaros al amanecer.
la traición es tan nuestra como el mar.
en este instante faltas.

recorrido por la transitoriedad

Wie kann das sein, dass diese nahen Tage
Fort sind, für immer fort, und ganz vergangen?
Hugo von Hofmannsthal
¿es posible escribir desde la intranquilidad?
¿cuando el mar es tormenta entre las manos?
¿cuando la ciudad es un incendio de recuerdos?
¿cuando vale un carajo quién eres, por qué, cuándo?

es difícil saber quién soy, y cómo
han pasado los años, las palabras.

recorro la mañana como un gato callado.
entro en un cuarto, salgo de un instante,
para caer en otro y no hay rastros de mi historia,
de los días azules y las noches contigo.

¿es posible ser alguien que no soy?
¿es posible si no se sabe nada? 

estoy disperso como el agua, mientras la lluvia
es música en la noche solitaria.
los libros, las libretas, los caminos de un día,
el polvo acumulado en las preguntas del mes

son la mentira nuestra, la verdad compartida.
no podría decir quién diablos soy,

pero no soy el mismo de aquel año.
el yo desconocido del que te enamoraste
por quien lo diste todo completamente a ciegas,
sin importar los sueños arruinados.

no existen lo secretos:
estar vivo es vivir en la batalla
para aceptar un día la derrota.

lunes, 28 de diciembre de 2015

probabilidades de una noche

nadie tiene razón sobre el pasado,
aunque insistas en ser tú quien la tiene,
en no olvidar la página jodida
donde las cosas no pasaron como querías.

hay pocas cosas ciertas,
una de ellas es la soledad;
otra: nada podemos hacer para evitarla.
a nadie le interesa tu tristeza
cuando hay fiesta en la calle y luna llena.

es casi media noche
y este instante de whisky y buen tabaco
sabe que tu pasado es tan solo eso,
un montón de fragmentos, nada más.

todos esos momentos de lujuria,
aquellas escaleras, la azotea
donde dormimos bajo las estrellas,
nuestra oscuridad hecha de ciudades
compartidas, desnudas como el viento.
son canciones lejanas.

aunque quizá no estemos destinados
a permanecer juntos para siempre,
nuestros sueños disfrutan de la cama
donde el sudor del cuerpo es la caricia
y la violenta carne enamorada.

quizá nuestro destino es más bien otro paisaje,
algo más parecido a una sencilla plegaria
dicha por un budista retirado,
sentado en el rincón de una cantina.
algo tan necesario como el mar.

domingo, 27 de diciembre de 2015

nuestra estrella

voy a llegar muy lejos
y tú estarás conmigo
bailaremos reiremos haremos el amor
caminaremos junto al mar
habremos entendido cualquier cosa
habremos ignorado cualquier otra
y será lo de menos
la eternidad será nuestro jardín
la calma y la alegría para todos

sábado, 26 de diciembre de 2015

saciar la infinitud en la oscuridad

cuánto tiempo te lleva un poema,
quiero decir, un buen poema,
con versos que jamás se olviden
con un ritmo envidiable incluso por el olvido

hay estructuras hechas, terminadas
maneras de volver a reescribir lo mismo
obedecen al día o a esa noche
donde han vivido hombres sin retorno.
pero los viejos moldes no te sirven.

tú buscas un poema
una sencilla forma de entenderte
un cielo despejado una tormenta tupida
en realidad no importa
cualquier día aburrido que te mire a la cara
y te haga sentir vivo

y no porque estés muerto, claro está,
sino porque la vida es muchas veces
una carta que nunca llega
un desgastado escándalo a la orilla
de esas preguntas sin respuesta
el sonido callado del refrigerador
una noche cualquiera
como una navidad sin compañía

no importa el tiempo que haga falta
tus ojos esta noche
esa luz necesaria
para sobrevivir a la catástrofe
un poema, un buen poema, insisto.

viernes, 25 de diciembre de 2015

luna entre los tejados

en blanco alguna página
mientras la noche
se desnuda la luna

jueves, 24 de diciembre de 2015

secuencias cotidianas

en realidad nadie tiene mucho qué decir
la gente prepara sus cenas da recibe 
regalos abrazos y bebe 
se dicen palabras de aliento 
frases cálidas cursis con extraño origen
se felicita la gente da discursos palabras 
mensajes navideños
cosas mejores esperanza tener paz
amor tranquilidad en los hogares
palabras que se han repetido desde hace
cientos de años palabras que 
se usan para vender mejor 
cosas que el próximo año serán innecesarias 
gasto estrés tomar la delantera
los cuentos de navidad 
las historias de navidad
los adornos en la mesa las velas 
en las puertas
los árboles con luces esferas 
un sujeto disfrazado con barba blanda 
traje rojo riéndose entra hace bromas
algunos niños lloran 
regalos envueltos chistes
la gente se reúne por un momento 
siente que las cosas pueden mejorar
el dulce engaño cubre los ojos
surgen abrazos risas lágrimas 
entre ríos de alcohol drogas comida 
comida comida que se desperdicia 
caminar por la calle a esta hora y ver 
en muchas ventanas las luces encendidas
ocurren escenas similares 
moldes se procura no salirse del margen
en los que se ha concebido
hay también a quien esto no le importa
y sigue o intenta seguir su vida 
normal
como cualquier otro día otra noche
no es fácil pero lo intenta

miércoles, 23 de diciembre de 2015

un momento sin tiempo ni distancia

I
nos sentamos a tomar unas cervezas
deseo noche palabras
la oscuridad de una calle con destino
a todos los destinos
a todas las derrotas
a todos los besos posibles
la página esta página espera
tus palabras
bebemos cerveza
escuchamos música
las islas del fuego los lentos paisajes
a la luz de un silencio llegado
desde un momento sin tiempo
ni distancia
quedarse solo en el repetido instante
de tu llegar otra vez al amanecer
de tus ojos
estar ahí por un instante breve
sin reconocerte
sabiendo que eres eso
el fragmento de la pregunta jamás
respondida
el fragmento de nada
la nada de un fragmento entre las líneas
donde se ha escrito la nostalgia

II
qué harás mañana

martes, 22 de diciembre de 2015

1997

22 de diciembre
estaba por cumplir diecinueve años
y a los pies las promesas del futuro
los besos de unos labios que soñaban
con viajes a la luna

los días eran duros y salvajes
en las palabras no había mentiras
solo fuego y agua pura
tormentas y desiertos
labios rotos curados
poemas y canciones de pólvora y jardines
llenos de flores y alas nuestras alas 
sin derrotas

sin embargo el paisaje
rápidamente fue arrasado
brotó el grito de Acteal
nos tumbó de la nube
en las noticias no dábamos crédito
a lo que se decía
cuarenta y cinco indígenas tzotziles
acribillados
por paramilitares del priísmo
mujeres niños niñas que rezaban
con sus propias palabras y sus cantos
rezaban quizá para acabar con la pobreza
para tener coraje y levantarse
hacer a un lado el miedo
y romper las cadenas y ser libres
muy tranquilos rezaban
por nosotros quizá
mujeres niños niñas
en la pequeña iglesia de la localidad

sentí cómo mis manos se llenaban de sangre
coraje y rabia
odio impotencia contra todo
el amor era un chiste
una promesa estúpida de ricos

dejamos de pensar entonces en el amor
como en un cuento de hadas
como el camino único
como la luz de nuestras tempestades
porque a pesar todo
vivir entonces era como ahora
una locura o
más bien un arrojarse definitivamente
perderse en los caminos del infierno

aquel amanecer fue doloroso
desde Chiapas el cielo llegó herido
no supimos qué hacer
nos hubiera gustado al menos saber rezar

dieciocho años han pasado ya desde entonces
y aunque me gustaría decir otra cosa
detrás de cada día una duda se disuelve

el tiempo pasa y así será hasta la oscuridad
pero ahora
sólo puedo entender esta diatriba:
de la barbarie esclava es nuestra felicidad 

lunes, 21 de diciembre de 2015

memoria recostada

imágenes de días cálidos junto al mar
palabras quietas blancas silenciosas
la memoria se acuesta como un gato
entre libros y objetos que tuviste en tus manos
y entonces pienso en ti y en los paisajes
que recorrimos juntos
el rostro del recuerdo aparece así de pronto
me mira detenidamente a los ojos
me interroga me dice algo me hace pensar
en todo lo que fui en las promesas incumplidas
quiero escribir un verso con tu nombre

domingo, 20 de diciembre de 2015

burbujar

la luz en tus ojos
en la calle las sombras
y me enteré
las historias que 
he vivido 
lleno de sudor
naufragan los sapos
las mordidas
nuestras caricias y
la guitarra
el chacal
el paisaje
la carrera
los no somos nadie
los muros aterrados del orden
no existimos
la miel y la anchura del mar

sábado, 19 de diciembre de 2015

el silencioso estado de las máquinas

ríos de luces vino caliente carruseles algodones de azúcar
fragmentos un instante desarticulado construyéndose futuro
ojos derretidos situaciones se pierden filas gente pide
pan con cebolla queso comprar figuras que refuercen eso
la sensación de estar bien chido cómodo tranquilo satisfecho
agradecido complacido entre basura arrollada por el viento
entre periódicos con noticias de muertos por ataques aéreos
junto al silencioso estado de las máquinas de la construcción
las luces de automóviles de un lado al otro como calles perdidas
bicicletas carriolas patines del diablo y botellas de cerveza
en el camino y gritos bufandas empujones quejas perfumes baratos
gorros y ojos azules entre sacos gabardinas abrigos once grados
y la gente no está conforme no es lo mismo hace falta más frío
hace falta la nieve la sensación del vapor saliendo de la boca
el sabor  de los objetos calientes las mujeres abrigadas hasta
llegar a la desnudez de un cuerpo frío y mojado luego de
tiendas cerradas relojes marcando la misma hora el minuto exacto
los trenes puntuales llenos de palabras promesas alegría fiesta
tarde o temprano las fronteras serán destruidas

viernes, 18 de diciembre de 2015

algunos deseos de año nuevo

el sol se abrió paso y la maestra preguntó
qué deseos tienen para el año nuevo
los estudiantes de alemán
originarios de Rusia, Bulgaria, Ucrania,
México, Irán, Afganistán, Siria
entre los veinte y los cuarenta
con permisos de residencia
como refugiados
exiliados
viajeros
en un salón junto al mar Báltico
tratando de aprender gramática
alemana
yo quiero aprobar el examen dijo el búlgaro
yo quiero viajar a Rusia dijo la rusa
yo quiero ejercer mi profesión dijo la ucraniana
yo quiero conocer una alemana dijo el ruso
yo estudiar fotografía dijo el iraní
yo salud trabajo bienestar dijo la mexicana
yo quiero una vida tranquila dijo el sirio

jueves, 17 de diciembre de 2015

no sé qué pinches pasa

en el camino utilizo estas palabras al vuelo
las acomodo unterwegs con todo y sus Fehler
sus cosas que no entiendo
juego una canción cómo diablos suena al fondo
del vagón donde las mujeres viajan concentradas
en un libro sus audífonos sus recados
miran a través de las ventanas el paisaje del frío:
meine Liebe ist nicht sanft, me digo y sigo mirando
por la ventana: könnte weder der Sinn noch Kraft 
vor sich hertreiben, insisto al leer unos anuncios
en las estaciones que vamos dejando, und das trotz,  
la lógica carece igual de sentido,
der tatkräftige Mond, ninguna palabra se pierde
en el umbral de esta libreta que no existe
ein anderer Wind sí, me digo, ein anderer Sinn
ein anderer Welt y tus ojos proyectados en la ventana
los árboles dibujados sólo con sus ramas
sus fragmentos de líneas y fugas
jedes Weg wird sofort von anderen gefüllt
cada vez más acostumbrado a no perder el control
cuando es justo lo contrario lo que más necesitamos
ist es keine Zeit für uns? me digo doch!
y miro el sol blanco asomarse entre las nubes
a la orilla del sentido sin sentido
me digo me pienso me enredo me existo
wer die Stille hat, kriegt sich selbst
próxima estación Liederhagen quiero decir
Lichtenhagen con sus girasoles en los edificios 

miércoles, 16 de diciembre de 2015

todo está bien

hay quienes no tienen el menor interés en ti
y así está muy bien
a mucha gente le has dejado de importar
no le interesas
como una azotea olvidada y eso también
está muy bien
el fútbol es un negocio el básquet la política
tu cuerpo tu cabeza
el mundo en la mayoría de los casos
sus cuadros sociales
sus almanaques
el mundo
entero
se ha convertido en una gran tienda
negocio donde pocos tienen la posibilidad
de lograr salir adelante
y sólo unos cuantos cumplen sus sueños
por muy chingones o estúpidos
que sean
mucha gente que has conocido mujeres hombres
viejos niños
están completamente desinteresados en ti
y eso está estupendamente bien
como un mezcal a la orilla de la playa
no tienes que contestar un montón de estupideces
y eso está encabronadamente bien

martes, 15 de diciembre de 2015

la calma y la música

el piano de la noche suena en la habitación
es bueno estar aquí
con esta música y esta ventana hacia la noche
en este rincón del mundo
donde a pesar de la posible meditación
y la calma
no puede evitarse el olor a fracaso y repudio
que arrastra el tráfago cotidiano
de una realidad cada vez más desesperada
por permanecer
incluso a costa de sí misma
mejor esta música y este cuarto a solas
en este rincón del mundo
este piano que corre como un sol imperecedero
por el cuerpo desnudo de tu imagen

lunes, 14 de diciembre de 2015

nada nuevo

estás aquí tan vieja como una máquina de escribir
como una lata olvidada en los bodegones de la segunda guerra
como la palabra extraterrestre
nada de nuevo en tu presencia de fantasma aburrida
nada de nuevo en tu cuerpo de invisible suspiro de fragmento
estás aquí pequeña ave del paraíso
y me miras como si no hubiera adentro ni afuera
sólo un páramo incendiado y cubierto de auroras boreales
donde pastan las vacas del más maravilloso tedio
único capaz de revelarnos lo extraordinario de nuestra nulidad
estás aquí mi vieja ternura de siempre mi cristal
mi paisaje donde la imaginación es lo mismo que tocarte

domingo, 13 de diciembre de 2015

pila de libros

una pila de libros mexicanos
acumulados
junto al escritorio
autores mexicanos muertos
y vivos
algunos considerados jefes
guías
gurús de las letras mexicanas
acaparando antologías
premios
entrevistas
otros de autores que insisten
en conseguir algo
la obra sustancial
fundamental
un boleto para el silencio
de la posteridad
otros fingen que nada les importa
los libros están ahí
sin abrir
algunos todavía con su celofán
no sé si algún día los lea
si me den ganas
carajo
allá afuera
están las mujeres
los soles
las playas
la vida
no sé si los lea
sería bonito
pero, ¿me perdería de algo?

sábado, 12 de diciembre de 2015

ecuaciones sin comprensión

parece fácil pensar en el origen de las palabras
en cualquier otra cosa
cómo es que las esquinas las calles ahí las luces
cómo es que las flores los árboles nosotros
aquí
entre labios besos fríos dulces espuma de cerveza
sabor de licores invernales
organismos diseñados por mecanismos ignorantes
parece fácil pensar en el odio y el amor la guerra
la distancia los edificios que serán abandonados
ciudades que irán desapareciendo
puedes hacer cálculos sin entender nada
el resultado de nuestros relojes
nuestras palabras este lenguaje cubierto de arena
desierto playas del Pacífico
mares del Caribe junto a música de cuerpos desnudos
parece fácil esa la apariencia es eso
sólo eso nada más
un hecho surgido de variantes anhelos castigos
victorias y derrotas las ausencias
escucha la noche proseguir su camino entre tus mano

viernes, 11 de diciembre de 2015

es tan real

días grises y fríos entre silencio
preguntas sin respuesta
vino caliente y un poco de whisky
esta ciudad es tan real
como las ganas que tengo de mirarte
y preguntarte si quieres otro más
las explicaciones del presente
no tienen paciencia
el sol permaneció oculto todo el día
no así lo demás

jueves, 10 de diciembre de 2015

gato negro

era un gato negro y rondaba la casa
el jardín del edificio
llevaba varios días así buscaba comida
se escondía entre los arbustos
bajo los balcones
era un gato perdido como una pregunta
la gente le daba de comer
lo acariciaba
algunos niños se acercaban lo perseguían
el gato escapaba
más tarde volvía a aparecer
cauteloso quieto misterioso
como una sombra entre las ramas de la noche
tomaba su forma de gato 
aunque el frío creciera
se lamía las patas el cuerpo maullaba 
te miraba como si pensara en algo lejano
se escondía bajo las escaleras
yo llegaba y parecía saber cuando llegaba
sacaba su cabeza maullaba
me quería decir algo
me agachaba se acercaba lo acariciaba
le di comida
subió al departamento varias veces 
entró y después se quejaba 
me pedía salir y le abría la puerta y bajaba
las escaleras corriendo
como un suspiro
desaparecía y pasaban los días y otra vez
estaba ahí
como una historia llegada de no sé dónde
y capaz de modificar 
algunos fragmentos de la rutina
al verlo pensaba en cosas como la vida de los gatos
no precisamente en la de tigres o perros
en la de los gatos
recordé el gato que me rasguñó la pierna
tenía unos cuatro años
por accidente le pisé la cola y era un gato negro
sus garras se hundieron en mi pierna
y grité y el gato salió corriendo
y lloré y el gato regresó más tarde
como si nada hubiera pasado
pensé en el cadáver de un gato pequeño
que vi una vez en la calle
podrido y devorado por los insectos
pensé en los gatos de ella
en cómo le gustaba que se subieran a su cama
y los acariciaba y decía
que eran las mejores mascotas que podían existir
mejor que los perros
me gustan porque son más independientes
menos demandantes
se van y regresan y no te exigen nada
me decía ella
pensé en el gato de mi amigo
que murió de viejo y que enterraron en el jardín
de casa de sus padres
y en los gatos de mi mi mujer
que llegaron desde otro país y que viven en casa
de sus padres
la vida de los gatos
aquel gato negro bien alimentado 
se me acercaba y maullaba y restregaba su cuerpo
peludo y negro en mis manos
maullaba y algo me decía mientras lo acariciaba
desde hace días no lo he visto más
lo llamé le dejé comida agua pero aquello
lleva días intacto
frío por el frío
y el gato no ha aparecido más
pensé en escribir algo sobre los gatos
quería algo que tuviera que ver con ese estómago
que buscaba comida
un estómago con forma de gato
la vida en forma de gato
le tomé una foto 
podría ser algo insulso
aquel gato es parte de nuestra historia

miércoles, 9 de diciembre de 2015

ceniza nuestros destinos

levantarte el vestido
y sentir tu carne
hambriento
besar tu cuello
tu lengua
sentirla resbalar por
el silencio de
la mía
cruzar la distancia de
nuestros destinos
unirlos
deshacerlos
en la habitación
mientras la música
esa que
te pone
se pierde
como delirante manada de
búfalos
en la oscuridad
tú tan tóxica
tú y esta manera
de tratarte
tratarnos
destruirnos
y bailar en las cenizas

martes, 8 de diciembre de 2015

caminata en la playa

a la orilla del mar
amanecía
y el frío era una tenue capa
que cubrir la totalidad del silencio hacía
el mar como espejo nuestro a nuestro lado
quieto y lento
las huellas borrándose
en qué piensas cuando miras el mar
preguntó mi amigo sirio
en nada, ¿y tú?
pienso en mi país y en lo que pasa en mi país
en qué podría hacer para cambiar las cosas
en que no puedo hacer nada
en el futuro
seguimos caminando y callamos
él fumaba y su voz era suave
y triste y llena de heridas
a mi país no se puede regresar, dijo,
fumaba y fumaba y fumaba
caminamos y frente a nosotros una mujer
se desnudó y entró al mar
se bañó con la arena
desnuda y delicada en aquel frío
era una imagen hermosa
al verla ahí, sola en la inmensidad del mar
sólo se me ocurrió pensar en la posibilidad de la perfección
la tranquilidad del mar Báltico
el cielo que se abría con lentitud
el sol que asomaba sus rayos entre los tejados y los pinos y el frío
aquella mujer desnuda y hermosa
como una respuesta a cualquiera pregunta
cuando miramos el mar
un breve momento de la belleza
absorbido también por la destrucción y la catástrofe

lunes, 7 de diciembre de 2015

lo que sabemos

el principio del mundo está en tu cuerpo
cuando sales del agua
desnuda
te sacudes el sueño
el principio del mundo siempre tu desnudez 
aunque el fin de los finales sea 
lo que sabemos
en la habitación amanece y anochece
y tú caminas desnuda
me das a beber del vaso que llevas en la mano
me dices que no quieres hacer nada
sólo tú y yo en casa

domingo, 6 de diciembre de 2015

la voz de ella

eran un par de fotografías en el Caribe
el amanecer
en esa playa donde la vida ha sido
una chingonería
eran un par de fotos así
las nubes al fondo y la luz del sol
en su camino correcto
después una llamada y un silencio
la voz de ella
su voz que ha aprendido a volar
por esos cielos
y otros cielos
sus palabras como regalo para el mundo
las dulces sílabas de sus flores
mi hermana pequeña
hablándome de la vida, sus caminos,
los viajes las alas los ríos
con sus frutos
el mar que ella está alumbrando

un autobús en el desierto

bebes mezcal mientras ves caer la tarde por la calle
no tienes a dónde ir
pero tampoco importa
alguien toca la guitarra y canta una canción
un hombre le dice a una mujer sigo aquí
esperándote
ella responde que no va a volver
la canción pasa tan rápido
como los automóviles en la avenida
un río de imágenes borrosas
se desborda de tu memoria
hacia la nada
no conoces a nadie en este lugar
donde piensas que el mundo bien podría ser
no más que un cenicero
cuántos mezcales has bebdio, tampoco importa
cuando bebes te olvidas de los números
y recuerdas algo:
nunca has entendido nada
no podrías decir cómo ocurrieron las cosas
tampoco te puedes ir a dormir
por tus venas no corre solo sangre y alcohol
algo te quema por dentro
muy rápido
un autobús incendiado atravesando el desierto
un grito desencadenado
desde las profundidades de esas profundidades
donde creíste que encontrarías
eso que andabas buscando
y bebes con calma
la luz de la tarde es tan dulce y melodiosa
que quisieras recostarte ahí

sábado, 5 de diciembre de 2015

entre carruseles

el sabor de los cacahuates garapiñados
y nadie dice nada
nadie habla de esas nubes negras
en el desierto
del terror la sangre el delirio
la destrucción

nadie protesta
antes más bien el sabor del vino caliente
los algodones de azúcar
el chocolate caliente
entre las luces de navidad y los gorros
y los guantes y las risas
entre los carruseles
nadie dice nada de los muertos ni de la guerra

para qué decir algo, para qué
mejor ignorarlo
hacer como si nada pasara
anda, niña, cómete esos caramelos
qué quieres para navidad

viernes, 4 de diciembre de 2015

mezcal y tabaco

lo peor de todo fue el sabor a mezcal.
y tabaco. 
una sensación dura y salvaje.
un corto circuito en mis nervios.
la mezcla de ambos sabores en la noche.
mezcal y cigarro.
el ácido y pesado sabor emanando 
de su lengua.
de su saliva, como si trataran 
de escapar de la ciudad.
un sabor a metal y noche que se pierde.
lo peor fue eso.
sentir esa mezcla en mi saliva.
me sentí sin rumbo.
otra vez sentí que nada me importaba.
como antes me pasaba.
esa mezcla de sabores, aromas,
instantes. en contacto con mi vida,
otra vez.
sí, otra vez me regalaste mi ciudad.
me la diste a través de tus labios.
de tu lengua.
y ese aliento a eternidad de una sola
noche. solo una.
como son las mejores cosas 
de este mundo y de cualquier otro.
lo peor fue eso.
lo sé porque no dejo de pensar en cómo
en la forma.
en las luces de la ciudad
que corrían a nuestro lado en líneas
derritiéndose.
precipitándose en el silencio.

jueves, 3 de diciembre de 2015

el sol, las estrellas, el mar

compartir. sí, de eso se trata.
no importa qué ni cómo.
el pan. el vino. la cama.
compartir.
a todas horas. en todas partes.
sí y no.
un mezcal. un libro. una rola.
una buena rola.
una calle poco transitada.
o mucho.
una calle donde hay un árbol
parecido al de tu sueño.
un parque. un bosque. el mar.
compartir. es así.
lo que sea y cuando sea.
porque no hay otra manera
de soportarnos.
el coraje. los fantasmas.
los lugares extraños y las tonterías.
y escuchar tu risa.
y escuchar los latidos de tu pecho
bajo las sábanas.
mientras la ciudad se hunde ahí.
en la oscuridad, la nuestra.
la que hemos llenado
con las cenizas de nuestro destino.
la locura. el viaje.
compartir.
una rola. una buena rola.
un mezcal.
cómo hace falta.

miércoles, 2 de diciembre de 2015

sácalo

amanece y la luna
aún brillante
en el frío y el camino

martes, 1 de diciembre de 2015

misiones, carnal

leo en las noticias que Alemania enviará soldados
a combatir en Siria
cuando me llega el correo de un amigo
me dice que otro amigo en común ha muerto
me quedo pasmado no sé qué pensar
y escribo somos el odio y el escupitajo
ninguna guerra soluciona nada
pero guerras y violencia no dejarán de ocurrir
es burdo lo que escribo
pero me vale verga
las guerras sólo prolongan la agonía
y el dolor
y eso también les vale verga a los del gabinete de Merkel
parece que se trata de reiterar la tristeza y la destrucción
y la contradicción. la estupidez humana.
releo el correo de mi amigo y no entiendo.
le llamo por teléfono. me confirma su noticia.
¿quién no se da cuenta de esto?
pienso en el hombre que pide monedas en el puente
mientras cobija a su perro del frío
y le da de comer de su comida,
mientras otros se embarcan en misiones que otros
han dicho que son importantes
y entre sus pertenencias y su melodrama llevan fotografías
de familia de hijos la boda los amores perdidos.
o de plano no se llevan nada porque sólo tienen hambre
de un intoxicado heroísmo.
han creído en todas esas mentiras y en los cuarteles,
en sus generales y sus mandatarios.
y la gente habla del tema, respetuosa y seria.
tenía algunos años que no sabía de él,
el compa que murió. pensaba que estaba bien.
porque eso es lo que se suele pensar
cuando por x o z dejas de ver a alguien con quien
compartiste buenos momentos.
los periódicos se llenan de encabezados bélicos
tratan de justificar la intervención.
la gente va al café y desayuna panes dulces
y lee esos diarios y se explica lo que ocurre
para no sentirse mal, para soportar, ignorar
a los niños y las niñas, los jóvenes y las mujeres
y los hombres y los animales que han muerto
y morirán con los misiles pagados con sus impuestos.
pienso en el hombre del puente y su perro
en el odio adueñado del mundo
en mi compa muerto apenas desde ayer y en su risa
y en la noche emblemática
en que nos emborrachamos junto al Caribe
cuando él se tumbó al suelo con su chava
y se besaron, pedísimos, dos locos perdidos
por el mezcal y sus corazones llenos de un amor
insoportablemente infinito.