no quiero saber nada de tu vida
no quiero saber si fuiste o no fuiste
aquello que viviste adormecida
si un reino por dinero conseguiste
no, no me digas nada del pasado
de tu risa en las playas del dolor
del sujeto que dejaste terminado
con aires de futuro sin color
por mí puedes largarte para siempre
llevarte tu belleza hasta tu muerte
dejarme con el gusto naufragar
partir mi corazón antes que empiece
a latir como un tonto por tu suerte
se trata de tocarnos y jugar
martes, 31 de marzo de 2015
lunes, 30 de marzo de 2015
cierta calle
algunas hojas
regadas por la banqueta
una
banqueta gris
interminable
interminable
cuarteada
con tapas
de drenaje
y jardineras
y tabiques
y tabiques
en la
calle descansan las sombras
un viejo y
un niño juntos
caminan
caminan
sobre la
banqueta luces y sombras
como manchas
como manchas
de árboles
de casas
de edificios
autos
estacionados
ruido
chiflidos
silencios
charcos
ruido
chiflidos
silencios
domingo, 29 de marzo de 2015
en todas partes
desde hace días llueve
no puedes esconderte
las lecturas son intensas
las visiones distintas
tienes que mantenerte
y seguir
estás en todas partes
fumo
no pienso nada
sólo miro la lluvia caer
salpicar la ventana
como un susurro
entre luces
en esta orilla de ciudad
no puedes esconderte
las lecturas son intensas
las visiones distintas
los sueños
no importatienes que mantenerte
y seguir
estás en todas partes
fumo
no pienso nada
sólo miro la lluvia caer
salpicar la ventana
como un susurro
entre luces
en esta orilla de ciudad
sábado, 28 de marzo de 2015
allí está el agua
llueve allá afuera
el silencio se moja
la noche
mi mirada se moja
y mis palabras van
por esos andadores
donde surge la noche
entro en un bar
pido un vodka
no hay música
sólo voces
gente que platica
bebo y pienso en ti
en tus ojos y en los sueños
de tus ojos
llueve y pasan autos
la gente entra mojada
en los cristales breves
figuras deja la lluvia
bebo y miro mi vaso
un trago de vodka
no digo nada
pienso en el mar
y en tu caligrafía
autobuses
perfumes
las batallas que ganamos
bebo y llueve
el silencio de la primavera
en esta barra
el silencio se moja
la noche
mi mirada se moja
y mis palabras van
por esos andadores
donde surge la noche
entro en un bar
pido un vodka
no hay música
sólo voces
gente que platica
bebo y pienso en ti
en tus ojos y en los sueños
de tus ojos
llueve y pasan autos
la gente entra mojada
en los cristales breves
figuras deja la lluvia
bebo y miro mi vaso
un trago de vodka
no digo nada
pienso en el mar
y en tu caligrafía
autobuses
perfumes
las batallas que ganamos
bebo y llueve
el silencio de la primavera
en esta barra
viernes, 27 de marzo de 2015
ámame dos veces, amor
aquí está tu servilleta
úsame
como quieras
en los espacios asimilados
de tus entrañas
con tu corazón retacado de dudas
con tus mañas de depravadas
aquí está tu servilleta
tu animal de circo
tu rata de laboratorio
tu orden no dejará sus vértebras
caminar por la orilla
de tus onirismos
los que son los que no son
caminos entre nopales
y magueyes
sentada en un café
con sus amigas
ella me mira yo la miro
sentada con sus amigas
en un instante la realidad se desvanece
quedamos ella yo
pero sigo mi camino sólo vuelvo la vista
ella sigue sentada, sin moverse,
me mira la miro
algo comprendemos
algo como un poema ocurre
a esa hora del día
entre el tráfago de la rutina carnicera
algo ocurre
ella sonríe yo sonrío
diré algo: eso bastó
para derribar la brutalidad de la existencia
saber que fuimos felices
ahora Damien Jurado
su guitarra un eco colgado en la saudade de la tarde
los alfileres de esa su chillona
enterrándose en el recuerdo
un departamento crudo soleado en el Caribe
una mañana hermosa
una vez más lo eché a perder
no creí que fuera posible
pensé que no lo volvería a hacer
no sé qué decirte
juro por dios que no quería hacerlo
mis pendejadas dan risa
está bien
ni vergüenza ni orgullo
ni mediocridad
ni triunfo ni derrota
la mariposa revolotea en el jardín
el caracol trepa las paredes
el perro busca en los basureros
intuición
he estado tan ciego
puedes dejarlo cuando quieras
cuando quieras puedes
regresar
úsame
como quieras
en los espacios asimilados
de tus entrañas
con tu corazón retacado de dudas
con tus mañas de depravadas
aquí está tu servilleta
tu animal de circo
tu rata de laboratorio
tu orden no dejará sus vértebras
caminar por la orilla
de tus onirismos
los que son los que no son
caminos entre nopales
y magueyes
sentada en un café
con sus amigas
ella me mira yo la miro
sentada con sus amigas
en un instante la realidad se desvanece
quedamos ella yo
pero sigo mi camino sólo vuelvo la vista
ella sigue sentada, sin moverse,
me mira la miro
algo comprendemos
algo como un poema ocurre
a esa hora del día
entre el tráfago de la rutina carnicera
algo ocurre
ella sonríe yo sonrío
diré algo: eso bastó
para derribar la brutalidad de la existencia
saber que fuimos felices
ahora Damien Jurado
su guitarra un eco colgado en la saudade de la tarde
los alfileres de esa su chillona
enterrándose en el recuerdo
un departamento crudo soleado en el Caribe
una mañana hermosa
una vez más lo eché a perder
no creí que fuera posible
pensé que no lo volvería a hacer
no sé qué decirte
juro por dios que no quería hacerlo
mis pendejadas dan risa
está bien
ni vergüenza ni orgullo
ni mediocridad
ni triunfo ni derrota
la mariposa revolotea en el jardín
el caracol trepa las paredes
el perro busca en los basureros
intuición
he estado tan ciego
puedes dejarlo cuando quieras
cuando quieras puedes
regresar
jueves, 26 de marzo de 2015
desde hace un tiempo
las cosas han ocurrido de este modo
el tiempo se nos va entre las manos
frente a los ojos
la vecina tiende la ropa en el jardín
porque el sol de este día es luminoso
y cálido, a pesar de los cuatro grados
ya nacida oficialmente la primavera
porque así ocurre en esta ciudad
en la que el frío puebla las orillas
y los labios de tanta mujer hermosa
mujeres muy educadas en no moverse
de su lugar y cumplir con su rutina
las cosas son así desde hace un tiempo
ese tiempo que se asoma por los ojos
nos mira en el espejo sin mirar nada
cuando hacemos gestos y se oye cantar
a los mirlos, algunas palomas gorjean,
algunas gaviotas como aviones de papel
lazados por mis hijos
la música ilumina las ciudades las selvas
las playas, las carreteras donde me exploro
las cosas que han ocurrido desde entonces
un entonces con tu nombre
y el nombre que le pusimos a las nubes
a los atardeceres sentados a tu mesa
a las noches acostadas en tu sala
un entonces como viaje intergaláctico
del modo que menos imaginamos
la vida es este instante
estas palabras llenas de locura
y rabia y alegría
el silencio callado donde la vecina
ha colgado la ropa
sábanas infinitas de una blanca tristeza
infinitas tristezas de una sábana blanca
mientras pienso en tus piernas mojadas
en cómo te gustaba coger en la calle
en la azotea en los autos
sin tiempo
y después del cigarro en lo callado
después de las caricias bajo el silencio
decir lo que ocurre en este mundo
que se nos muere y se nos vuelve a nacer
el tiempo se nos va entre las manos
frente a los ojos
la vecina tiende la ropa en el jardín
porque el sol de este día es luminoso
y cálido, a pesar de los cuatro grados
ya nacida oficialmente la primavera
porque así ocurre en esta ciudad
en la que el frío puebla las orillas
y los labios de tanta mujer hermosa
mujeres muy educadas en no moverse
de su lugar y cumplir con su rutina
las cosas son así desde hace un tiempo
ese tiempo que se asoma por los ojos
nos mira en el espejo sin mirar nada
cuando hacemos gestos y se oye cantar
a los mirlos, algunas palomas gorjean,
algunas gaviotas como aviones de papel
lazados por mis hijos
la música ilumina las ciudades las selvas
las playas, las carreteras donde me exploro
las cosas que han ocurrido desde entonces
un entonces con tu nombre
y el nombre que le pusimos a las nubes
a los atardeceres sentados a tu mesa
a las noches acostadas en tu sala
un entonces como viaje intergaláctico
del modo que menos imaginamos
la vida es este instante
estas palabras llenas de locura
y rabia y alegría
el silencio callado donde la vecina
ha colgado la ropa
sábanas infinitas de una blanca tristeza
infinitas tristezas de una sábana blanca
mientras pienso en tus piernas mojadas
en cómo te gustaba coger en la calle
en la azotea en los autos
sin tiempo
y después del cigarro en lo callado
después de las caricias bajo el silencio
decir lo que ocurre en este mundo
que se nos muere y se nos vuelve a nacer
miércoles, 25 de marzo de 2015
un cachorro lastimado
qué tan rápido puedes conducir
preguntaste
eran más de las tres de la mañana
y no había tráfico
encendiste el porro y acarició tu risa
la adrenalina
tus palabras eran mariposas
alcoholizadas y felices
revoloteando por todos los rincones
de mi vida
volábamos y veíamos la ciudad
como un cachorro lastimado
agresivo
volábamos a ras del suelo
los pasos en la tierra
las camas que compartimos
dibujos en la noche
cuerpos desnudos entre las sábanas
tu mirada era un buen tabaco
a las cuatro de la madrugada
no sé,. te dije
y apreté el acelerador a fondo
Periférico y los puentes
Circuito Interior y los puentes
reclinaste el asiento
bajaste la ventana
¿habrá sido un sueño?
¿acaricié tu pelo?
¿nos besamos?
éramos incorregibles
te valía verga el mundo y el futuro
a veces echo de menos
tu manera de drogarte
por la mañana
el odio hacia tu padre
y el rencor hacia tu madre
¿por qué no nos quedamos
a vivir en esa playa?
preguntaste
eran más de las tres de la mañana
y no había tráfico
encendiste el porro y acarició tu risa
la adrenalina
tus palabras eran mariposas
alcoholizadas y felices
revoloteando por todos los rincones
de mi vida
volábamos y veíamos la ciudad
como un cachorro lastimado
agresivo
volábamos a ras del suelo
los pasos en la tierra
las camas que compartimos
dibujos en la noche
cuerpos desnudos entre las sábanas
tu mirada era un buen tabaco
a las cuatro de la madrugada
no sé,. te dije
y apreté el acelerador a fondo
Periférico y los puentes
Circuito Interior y los puentes
reclinaste el asiento
bajaste la ventana
¿habrá sido un sueño?
¿acaricié tu pelo?
¿nos besamos?
éramos incorregibles
te valía verga el mundo y el futuro
a veces echo de menos
tu manera de drogarte
por la mañana
el odio hacia tu padre
y el rencor hacia tu madre
¿por qué no nos quedamos
a vivir en esa playa?
martes, 24 de marzo de 2015
aproximaciones
miro el desmadre de la casa
la ropa tirada los libros
los ceniceros llenos
las botellas vacías
acepto mis dudas
mis frustraciones
mi coraje
destapo una cerveza
enciendo otro cigarro
bebo y fumo
miro por la ventana
acepto que no estás
y el día
y la noche
el frío y las heridas
mi desesperación
mis ganas
mis vicios
a través de esto miro
las cosas como son
la ropa tirada los libros
los ceniceros llenos
las botellas vacías
acepto mis dudas
mis frustraciones
mi coraje
destapo una cerveza
enciendo otro cigarro
bebo y fumo
miro por la ventana
acepto que no estás
y el día
y la noche
el frío y las heridas
mi desesperación
mis ganas
mis vicios
a través de esto miro
las cosas como son
lunes, 23 de marzo de 2015
remanso y perros
aquí no se escucha ladrar a los perros
la noche es fría
el metro de la ciudad de México es recuerdo
los hoteles de paso del centro
las mujeres desnudas de la alameda
tus piernas abriéndose lentamente en la cama
aquí no hay perros callejeros
bebo y fumo en este cuarto y miro la noche
lleno de promesas y de furia
con una extraña sensación de remanso
aunque no dejo de ser ciudad
la noche es fría
el metro de la ciudad de México es recuerdo
los hoteles de paso del centro
las mujeres desnudas de la alameda
tus piernas abriéndose lentamente en la cama
aquí no hay perros callejeros
bebo y fumo en este cuarto y miro la noche
lleno de promesas y de furia
con una extraña sensación de remanso
aunque no dejo de ser ciudad
domingo, 22 de marzo de 2015
la suave luz del invierno
viajar por la ciudad y detenerse
en una calle
frente a una ventana
en los ojos de una mujer desconocida
el polvo en las esquinas
las hojas que esperan la escritura
el olor a cerveza y las nubes
sentarse en la banca de la tarde
respirar la suave luz del invierno que termina
los barcos anclados a la orilla del río
pronto partirán
los escondites de la ciudad
la mujer desconocida deja de serlo
dice tu nombre
no importa que te hayas equivocado
en una calle
frente a una ventana
en los ojos de una mujer desconocida
el polvo en las esquinas
las hojas que esperan la escritura
el olor a cerveza y las nubes
sentarse en la banca de la tarde
respirar la suave luz del invierno que termina
los barcos anclados a la orilla del río
pronto partirán
los escondites de la ciudad
la mujer desconocida deja de serlo
dice tu nombre
no importa que te hayas equivocado
sábado, 21 de marzo de 2015
el callejón de la noche
espero sentado y en silencio
después de que te has ido
tu recuerdo en el callejón
tu desaparecer en la noche
las palabras surgen
salvajes
brutales
el silencio se calienta
pienso en ti
piensas en mí
nuestros pensamientos se tocan
nuestros cuerpos dicen juntos
lujuria
ahora estás aquí
hueles a vino tinto
tu fantasma se hace carne
te gustaría escapar
no puedes
después de que te has ido
tu recuerdo en el callejón
tu desaparecer en la noche
las palabras surgen
salvajes
brutales
el silencio se calienta
pienso en ti
piensas en mí
nuestros pensamientos se tocan
nuestros cuerpos dicen juntos
lujuria
ahora estás aquí
hueles a vino tinto
tu fantasma se hace carne
te gustaría escapar
no puedes
viernes, 20 de marzo de 2015
resistencia
la soledad somos nosotros
y nos resistimos
la luz entra en nuestros rincones
el mar moja tus pies
nos abrazamos toda la noche
y nos resistimos
la luz entra en nuestros rincones
el mar moja tus pies
nos abrazamos toda la noche
jueves, 19 de marzo de 2015
aquellos micros
subí al micro y estabas sentada ahí
como esperándome
aunque nunca me hubieras visto
y me senté a tu lado
y pensé en la playa y en el sol
y te imaginé ahí
arrojándote a las olas en ese calor
de marzo, como una niña
que ignora por completo el tiempo
y el futuro
después imaginé que entrábamos
en un bar
y nos emborrachábamos y reíamos
y nos besábamos a mitad
de una rola que incluso dejaba
dejaba de ser tan simple
porque la vida se trata de eso
decirnos algo y bailar
hacernos reír
robarte un beso
meterte la mano
fumar un buen porro en la azotea
del edificio más alto de la ciudad
levantarnos
a la hora que nos dé la gana
no ir a ninguna lado
quedarnos ahí en la cama
fumando y cogiendo
haciéndonos preguntas
y respondiendo lo que sea
aquel micro cruzó Periférico y Reforma
una máquina del tiempo
con su guitarrista rupestre incluido
con sus señora con bolsas del mercado
poco antes de atascarse
con sus niños huyendo de la escuela
un micro forrado de calcomanías de Cristo
y la Virgen y unos santos
con su hip-hop-cumbianchero
y las mentadas de madre del chofer
como un montón de pájaros histéricos
que quieren escapar
en ese micro estabas con tus ojos verdes
pintados de negro
tus tatuajes de aves y flores
tu nariz perforada
guiado por los demonios de mi lujuria
me senté a tu lado y respiré
estaba junto a ti
los tragafuegos podían incendiarlo todo
y hubiera estado bien
hubieran acabado con nosotros
en aquel micro lleno de lucecitas apagadas
y terciopelos y palabras de amor
el olor a odio en la ciudad
y tú y yo ahí
a punto de iniciar el diálogo
que nos llevaría a atravesar días
semanas, meses de sexo salvaje
hasta que llegaron los sueños
y arruinaron las cosas
había olvidado el inicio de nuestra historia
sea importante o no
pensaba en aquello
mientras veía una pareja de palomas
que disfrutan del atardecer
ese micro y tú en aquel asiento navajeado
eras una luz indestructible
la oscuridad
como esperándome
aunque nunca me hubieras visto
y me senté a tu lado
y pensé en la playa y en el sol
y te imaginé ahí
arrojándote a las olas en ese calor
de marzo, como una niña
que ignora por completo el tiempo
y el futuro
después imaginé que entrábamos
en un bar
y nos emborrachábamos y reíamos
y nos besábamos a mitad
de una rola que incluso dejaba
dejaba de ser tan simple
porque la vida se trata de eso
decirnos algo y bailar
hacernos reír
robarte un beso
meterte la mano
fumar un buen porro en la azotea
del edificio más alto de la ciudad
levantarnos
a la hora que nos dé la gana
no ir a ninguna lado
quedarnos ahí en la cama
fumando y cogiendo
haciéndonos preguntas
y respondiendo lo que sea
aquel micro cruzó Periférico y Reforma
una máquina del tiempo
con su guitarrista rupestre incluido
con sus señora con bolsas del mercado
poco antes de atascarse
con sus niños huyendo de la escuela
un micro forrado de calcomanías de Cristo
y la Virgen y unos santos
con su hip-hop-cumbianchero
y las mentadas de madre del chofer
como un montón de pájaros histéricos
que quieren escapar
en ese micro estabas con tus ojos verdes
pintados de negro
tus tatuajes de aves y flores
tu nariz perforada
guiado por los demonios de mi lujuria
me senté a tu lado y respiré
unos breves minutos de tensión
en los cuales todo fue perfectoestaba junto a ti
los tragafuegos podían incendiarlo todo
y hubiera estado bien
hubieran acabado con nosotros
en aquel micro lleno de lucecitas apagadas
y terciopelos y palabras de amor
el olor a odio en la ciudad
y tú y yo ahí
a punto de iniciar el diálogo
que nos llevaría a atravesar días
semanas, meses de sexo salvaje
hasta que llegaron los sueños
y arruinaron las cosas
había olvidado el inicio de nuestra historia
sea importante o no
pensaba en aquello
mientras veía una pareja de palomas
que disfrutan del atardecer
ese micro y tú en aquel asiento navajeado
eras una luz indestructible
la oscuridad
miércoles, 18 de marzo de 2015
con la luz encendida
pongo a lavar los trastes
limpio la cocina
ajusto el despertador
entro al baño y me lavo
la cara
los dientes
cierro la llave y en el espejo
detenidamente me miro
entro en mi silencio
no hay caminos
no sé nada
limpio la cocina
ajusto el despertador
entro al baño y me lavo
la cara
los dientes
cierro la llave y en el espejo
detenidamente me miro
entro en mi silencio
no hay caminos
no sé nada
martes, 17 de marzo de 2015
ejercicio 209
herido rebelde vacío negro
eterno real ligero sueño
fuego escrito santo amor
esplendor fiesta diamante selva
papel mundo futuro robot
flecha canto verde fuga
cristal mar irreverente primavera
Júpiter Vulcano glorioso pergamino
lluvia palabras reliquia ardiente
eterno real ligero sueño
fuego escrito santo amor
esplendor fiesta diamante selva
papel mundo futuro robot
flecha canto verde fuga
cristal mar irreverente primavera
Júpiter Vulcano glorioso pergamino
lluvia palabras reliquia ardiente
lunes, 16 de marzo de 2015
lámpara
Mozart suena en la radio
la noche está en esa rama
recostada en el escritorio
ahora escribo tu nombre
la noche está en esa rama
recostada en el escritorio
ahora escribo tu nombre
domingo, 15 de marzo de 2015
la eterna melodía de las olas
nuevamente me descubro pensando en tus ojos.
en la ciudad de noche y en tus ojos.
en la playa y en tu mirada perdida en el horizonte.
paisajes llenos de sol, paisajes con tormentas.
las cosas que dejé de hacer por miedo al destino
que a pesar de no existir, paraliza.
las cartas, las postales, las flores que no te envié.
siguen ahí, a pesar del precipicio, intactas.
la vez que decidí no llegar.
cuando dejé que te marcharas y no te seguí.
el tiempo son esas gaviotas y ese mar
con la eterna melodía de sus olas.
hay tardes que jamás olvidaré,
aunque pierda la memoria o me muera.
siempre estarán ahí.
como los sueños infinitos.
noches de ron y música y bailes sin destino.
el azar está de nuestro lado.
sólo hace falta saber entregarse a su caída.
mi vida carece de importancia y no pido más.
está bien así. escribo porque necesito hacerlo.
escribo porque escribo. no hay ningún por qué.
sigo adelante. pero si pudiera elegir algo.
por ejemplo, cómo me gustaría morir.
sin duda sería después de coger contigo.
justo cuando estamos en lo más alto,
flotando, y por un momento me miras
y me sonríes como lo hiciste entonces
para siempre por primera vez.
pienso en el principio del delirio y el éxtasis.
una noche calurosa como esta. aunque distinta.
luego de cerrar el último bar y tú y yo
cogidos de la mano para largarnos a tu cama.
un instante como este, aunque distinto.
una vida como esta, pero con alas.
en la ciudad de noche y en tus ojos.
en la playa y en tu mirada perdida en el horizonte.
paisajes llenos de sol, paisajes con tormentas.
las cosas que dejé de hacer por miedo al destino
que a pesar de no existir, paraliza.
las cartas, las postales, las flores que no te envié.
siguen ahí, a pesar del precipicio, intactas.
la vez que decidí no llegar.
cuando dejé que te marcharas y no te seguí.
el tiempo son esas gaviotas y ese mar
con la eterna melodía de sus olas.
hay tardes que jamás olvidaré,
aunque pierda la memoria o me muera.
siempre estarán ahí.
como los sueños infinitos.
noches de ron y música y bailes sin destino.
el azar está de nuestro lado.
sólo hace falta saber entregarse a su caída.
mi vida carece de importancia y no pido más.
está bien así. escribo porque necesito hacerlo.
escribo porque escribo. no hay ningún por qué.
sigo adelante. pero si pudiera elegir algo.
por ejemplo, cómo me gustaría morir.
sin duda sería después de coger contigo.
justo cuando estamos en lo más alto,
flotando, y por un momento me miras
y me sonríes como lo hiciste entonces
para siempre por primera vez.
pienso en el principio del delirio y el éxtasis.
una noche calurosa como esta. aunque distinta.
luego de cerrar el último bar y tú y yo
cogidos de la mano para largarnos a tu cama.
un instante como este, aunque distinto.
una vida como esta, pero con alas.
sábado, 14 de marzo de 2015
viernes, 13 de marzo de 2015
memoria
estoy callado frente a la ventana
no pienso en nada
sólo miro las luces encendidas
de los departamentos
la noche es rojiza
tiene un ligero rumor cobrizo
mi memoria son tus palabras
tu cuerpo
cuando te levantas de la arena
entras al mar
y después, bajo un sol sin olvido,
sales mojada
y caminas hasta donde estoy
no pienso en nada
sólo miro las luces encendidas
de los departamentos
la noche es rojiza
tiene un ligero rumor cobrizo
mi memoria son tus palabras
tu cuerpo
cuando te levantas de la arena
entras al mar
y después, bajo un sol sin olvido,
sales mojada
y caminas hasta donde estoy
jueves, 12 de marzo de 2015
cero dialéctica
las gaviotas de fuego de tus sueños
tus sueños de fuego de gaviotas
el fuego de tus gaviotas en mis sueños
nuestro fuego a lo largo de la playa
un día, otra vez
tus sueños de fuego de gaviotas
el fuego de tus gaviotas en mis sueños
nuestro fuego a lo largo de la playa
un día, otra vez
miércoles, 11 de marzo de 2015
cables subterráneos
quién escribe estas
palabras
sobre el vacío
los ojos que ven este cielo
de quién
son
qué miran
quién escucha el ruido
de lentos
pasos
en el
techo
los
pájaros en la ventana
quién siente
el frío de esta habitación
martes, 10 de marzo de 2015
el tiempo
el tiempo son los trenes que pasan
quisiera dejarte tranquila
gaviotas y palomas en el cielo
el tiempo
el tiempo
el tiempo
que no te importe lo que digo
miro tu cuarto desde la ventana
quisiera dejarte tranquila
gaviotas y palomas en el cielo
el tiempo
el tiempo
el tiempo
que no te importe lo que digo
miro tu cuarto desde la ventana
lunes, 9 de marzo de 2015
escritura
nunca te detengas
ya lo tienes
y lo sabes
no hay ternura
debes mantenerte
al límite
y más
más
allá
siempre
ya lo tienes
y lo sabes
no hay ternura
debes mantenerte
al límite
y más
más
allá
siempre
domingo, 8 de marzo de 2015
sábado, 7 de marzo de 2015
paisajes
en esta ciudad no hay rastro de las húmedas frases
que compartimos a la orilla del mar
camino por la orilla de mi vida
junto a la cual se extiende
un desierto de libros insatisfechos
hojas llenas de paisajes con el fuego del verano
carreteras por donde viajan quienes lo han dejado todo
a través de la cortina se ve la mancha del sol
la sombra de algunas aves
nada ha cambiado desde entonces
que compartimos a la orilla del mar
camino por la orilla de mi vida
junto a la cual se extiende
un desierto de libros insatisfechos
hojas llenas de paisajes con el fuego del verano
carreteras por donde viajan quienes lo han dejado todo
a través de la cortina se ve la mancha del sol
la sombra de algunas aves
nada ha cambiado desde entonces
viernes, 6 de marzo de 2015
ejercicio lírico
aquí dejo un poema todos los días
quiero decir
lo intento
escribo y emborrono y tiro
y busco un poema
unos versos que valgan la pena
uno aunque sea
una palabra que hable de ti
de mí
de nosotros
que hable del tiempo de gloriosos jardines
de los instantes de sol y playa
de tu cuerpo desnudo en el calor de la noche
un verso que hable de ti
de mí
de nosotros
de la triste rutina de los días laborales
del odio que sientes
del desprecio y el rencor que te cortan la voz
como una navaja entre los días
de ese dolor por no haberte largado esa mañana
antes del canto de paja del gallo
un poema para ti
para mí
para nosotros
para los días de exceso
para soportar el vicio
una palabra donde puedas ver el motivo
de los átomos
su precisa manera de no tener sentido
donde bailan las células
una palabra que levante los paisajes del sueño
tus bosques profundos
tus lunas de enigma
las ciudades llenas de tráfico y persecución
los bares donde cantamos
las cantinas desiertas
las calles
las casas
los ríos negros donde se bañan los perros
dejo un poema aquí cada día
para dejar en claro el origen salvaje
de tu espíritu
del mío
aunque el sistema solar
las galaxias
tu número telefónico
las libretas
te dejo un poema aquí cada día
como un estallido del jazz
como ver un nutrido río que corre
en el fuego
es tuyo
aunque no te importe
está aquí
sin corregir
sin maquillar
vivo
quiero decir
lo intento
escribo y emborrono y tiro
y busco un poema
unos versos que valgan la pena
uno aunque sea
una palabra que hable de ti
de mí
de nosotros
que hable del tiempo de gloriosos jardines
de los instantes de sol y playa
de tu cuerpo desnudo en el calor de la noche
un verso que hable de ti
de mí
de nosotros
de la triste rutina de los días laborales
del odio que sientes
del desprecio y el rencor que te cortan la voz
como una navaja entre los días
de ese dolor por no haberte largado esa mañana
antes del canto de paja del gallo
un poema para ti
para mí
para nosotros
para los días de exceso
para soportar el vicio
una palabra donde puedas ver el motivo
de los átomos
su precisa manera de no tener sentido
donde bailan las células
una palabra que levante los paisajes del sueño
tus bosques profundos
tus lunas de enigma
las ciudades llenas de tráfico y persecución
los bares donde cantamos
las cantinas desiertas
las calles
las casas
los ríos negros donde se bañan los perros
dejo un poema aquí cada día
para dejar en claro el origen salvaje
de tu espíritu
del mío
aunque el sistema solar
las galaxias
tu número telefónico
las libretas
te dejo un poema aquí cada día
como un estallido del jazz
como ver un nutrido río que corre
en el fuego
es tuyo
aunque no te importe
está aquí
sin corregir
sin maquillar
vivo
jueves, 5 de marzo de 2015
miércoles, 4 de marzo de 2015
fantasía oriental
mientras anochece
escucho Balákirev
sin saberlo
escribo tus palabras
piano desbocado
la sangre de nuestras estaciones
mis palabras
mientras anochece
y el mundo deja su maravilloso
traje de luz y llama
no soy nadie
no eres nadie
uno y ninguno
el piano que palpita y se esparce
nada
el viento
el color de los sueños
galopan en la transparencia
de la oscuridad
escucho Balákirev
sin saberlo
escribo tus palabras
piano desbocado
la sangre de nuestras estaciones
mis palabras
mientras anochece
y el mundo deja su maravilloso
traje de luz y llama
no soy nadie
no eres nadie
uno y ninguno
el piano que palpita y se esparce
nada
el viento
el color de los sueños
galopan en la transparencia
de la oscuridad
martes, 3 de marzo de 2015
reflejos en la ventana
un reloj que marca la hora de otro tiempo
unos discos de acetato
la fotografía de una ola a la que se dirigen
un par de surfistas
portarretratos y libros y cajas de cartón
algunas plantas y algunos muebles
reflejos de objetos en la ventana
como un rumor de siglos y de lluvia
porque afuera llueve y es de noche
y los siglos son un parpadeo
solo el silencio sostiene estas imágenes
a la orilla de este simulacro
donde empiezan los latidos del misterio
al amanecer habrán desaparecido
unos discos de acetato
la fotografía de una ola a la que se dirigen
un par de surfistas
portarretratos y libros y cajas de cartón
algunas plantas y algunos muebles
reflejos de objetos en la ventana
como un rumor de siglos y de lluvia
porque afuera llueve y es de noche
y los siglos son un parpadeo
solo el silencio sostiene estas imágenes
a la orilla de este simulacro
donde empiezan los latidos del misterio
al amanecer habrán desaparecido
lunes, 2 de marzo de 2015
la luz de la tarde
busco en la luz del día los pasos que soy
en la claridad de las horas que pasan
en el silencio de la casa vacía
en la calle
alguien me llama
mis voces interiores
las voces que me nombran y que soy
en la luz de la tarde reposos
y busco y fumo y miro la calle
desde la ventana
antes de la caída de la noche
sigo lentamente
palpo las plantas las paredes el viento
respiro el rumor de mis pasos
los pasos que me han traído hasta aquí
los pasos que sigo dando
mi camino y el vacío
donde estoy
y soy
silencio de ciudad dormida
de profundidad marina
de cielo nocturno
silencio que soy
divago y voy cayendo en la búsqueda
en la luz
en los pasos
en el eco de esos pasos
en la nada
y el rumor me besa
mi camino
mi cielo nocturno
el instante la dosis precisa de eternidad
en la claridad de las horas que pasan
en el silencio de la casa vacía
en la calle
alguien me llama
mis voces interiores
las voces que me nombran y que soy
en la luz de la tarde reposos
y busco y fumo y miro la calle
desde la ventana
antes de la caída de la noche
sigo lentamente
palpo las plantas las paredes el viento
respiro el rumor de mis pasos
los pasos que me han traído hasta aquí
los pasos que sigo dando
mi camino y el vacío
donde estoy
y soy
silencio de ciudad dormida
de profundidad marina
de cielo nocturno
silencio que soy
divago y voy cayendo en la búsqueda
en la luz
en los pasos
en el eco de esos pasos
en la nada
y el rumor me besa
mi camino
mi cielo nocturno
el instante la dosis precisa de eternidad
domingo, 1 de marzo de 2015
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