viernes, 27 de marzo de 2015

ámame dos veces, amor

aquí está tu servilleta
úsame
como quieras
en los espacios asimilados
de tus entrañas
con tu corazón retacado de dudas
con tus mañas de depravadas
aquí está tu servilleta
tu animal de circo
tu rata de laboratorio
tu orden no dejará sus vértebras
caminar por la orilla
de tus onirismos
los que son los que no son
caminos entre nopales
y magueyes
sentada en un café
con sus amigas
ella me mira yo la miro
sentada con sus amigas
en un instante la realidad se desvanece
quedamos ella yo
pero sigo mi camino sólo vuelvo la vista
ella sigue sentada, sin moverse,
me mira la miro
algo comprendemos
algo como un poema ocurre
a esa hora del día
entre el tráfago de la rutina carnicera
algo ocurre
ella sonríe yo sonrío
diré algo: eso bastó
para derribar la brutalidad de la existencia
saber que fuimos felices
ahora Damien Jurado
su guitarra un eco colgado en la saudade de la tarde
los alfileres de esa su chillona
enterrándose en el recuerdo
un departamento crudo soleado en el Caribe
una mañana hermosa
una vez más lo eché a perder
no creí que fuera posible
pensé que no lo volvería a hacer
no sé qué decirte
juro por dios que no quería hacerlo
mis pendejadas dan risa
está bien
ni vergüenza ni orgullo
ni mediocridad
ni triunfo ni derrota
la mariposa revolotea en el jardín
el caracol trepa las paredes
el perro busca en los basureros
intuición
he estado tan ciego
puedes dejarlo cuando quieras
cuando quieras puedes
regresar

No hay comentarios: