no es tarde para que aceptes que los días
son breves chispazos en el oscuro
grito de la eternidad
grito de la eternidad
breves pausas
destellos
partituras de una conversación
a la que no le importan los poemas
no podemos hacer más al respecto
y este día
habitamos dos días distintos
mientras te veo fumando en el balcón
te recuerdo como una herida en la nieve
pero hermosa
como los bosques en invierno
permanecemos quietos en los brazos
cuando eso es suficientes
como esos barcos averiados
que han terminado por olvidarse en el paisaje
que han terminado por olvidarse en el paisaje
estamos anclados a una necesidad
que no queremos
nos frotamos las manos
comemos en mesas diferentes
no debería ser así
pero es así
atrapados en la desesperación
de no poder ser otros
tus sueños no te alcanzan
la incertidumbre despluma tu alegría
me desmorono como las cenizas del cigarro
que fumas en el balcón
quisiera desvestirte aunque no tengamos
nada en común
que solo fueras mi amante
y me platicaras cosas triviales de tu vida
mientras entras al baño del hotel
nos hemos necesitado y mientras partimos el pan
recordamos que esa necesidad
ya no es necesaria
es momento de dejarnos tranquilos como a la duda
presa en su insignificancia
presa en su insignificancia
el abismo está lleno de ciudades que no cruzaremos juntos
quisiera besar tu cintura
esas manos tan hermosas que tienes
esas manos tan hermosas que tienes
como toda tú
pero no tiene sentido prolongar más lo que ya sabemos
no nos hemos arrojado juntos del puente del delirio
no tenemos ganas suficientes
para fundar la ciudad incandescente
para fundar la ciudad incandescente
prefiero seguirte soñando así
la que sólo yo sé que eres
y que encuentres el futuro a tu medida
con el dulce espejismo de una saludable vida cotidiana
custodiada por seguros
custodiada por seguros
que el cuaderno de tus planes se mantenga emborronado
de fechas por cumplir y sanos presupuestos
de fechas por cumplir y sanos presupuestos
porque los días nunca serán otra cosa
que breves destellos de luz
que breves destellos de luz
en esa eternidad
que alguien como tú
dejó en el corazón de mi memoria
que alguien como tú
dejó en el corazón de mi memoria
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